Ir al contenido principal

“HACER DE LA NECESIDAD VIRTUD”

En los años 60, debido al aumento del pillaje y las ruinas en los monumentos religiosos, surge la necesidad de rescatar y restaurar estas joyas perdidas por la provincia . 

Don Ángel Sancho campo, fundador del Museo Diocesano de Palencia es el encargado de tal tarea.

El Museo Diocesano de Arte, situado en el Palacio Episcopal, consta de 14 salas repletas de cuadros, esculturas y orfebrería de motivo religioso.

Comenzamos la visita por la Sala 1, Sala los Artesonados, donde además de estos podemos admirar un gran retablo dedicado a la Virgen María (procedente de Vascones de Valdavia -1538 de la Escuela de Flandes).  

Artesonado procedente del Convento de Cuenca de Campos

Seguimos la visita, y llegamos a la segunda Sala, llamada de Pedro Berruguete, donde llama mi atención La Virgen de la Leche (1450-1504) por la riqueza de los detalles (el uso del rojo y los dorados).

La Virgen de la Leche

En la tercera y cuarta sala, vemos pinturas Románicas y Góticas en las que se observa claramente la evolución entre ambos periodos, como dibujos más planos y el uso del pan de oro en el estilo gótico (Tabla de Santa Columba).

Atravesamos el Patio de estilo Herreriano, donde nos  encontramos un sorprendente pozo y nos adentramos en las antiguas caballerizas, donde podemos continuar la visita. 


Patio con pozo

Enumerar todas las obras que se pueden ver sería prácticamente imposible, pero destaca la sala de Orfebrería, donde se exponen joyas como una cruz Procesional procesional procedente de Villamuera de la Cueza , la Corona de la Virgen de la Calle o la Virgen Sedente de Husillos.


Cruz Procesional de Villamuera de la Cueza (S. XIII-S XV)
                                                 
Finalizamos la visita, atravesando las últimas salas, para llegar a lo que nuestro guía Nazario, definió, como LA JOYA DEL MUSEO, la Imagen original de la Virgen de Brezo, talla Románica  del Siglo XIII.
Vista desde el pasillo,  Calendario Litúrgico (S. XV)


Talla original de la Virgen del Brezo 

Comentarios

Entradas populares de este blog

LOS BERRUGUETE EN PAREDES DE NAVA

En Castilla casi la totalidad de los linajes de alta nobleza surge a mediados del siglo XIV y se expanden durante el siglo XV, como es el caso del linaje de los  Manrique, (Rodrigo Manrique I conde de Paredes y padre del poeta Jorge Manrique  que ya nació en  Paredes y que escribió “Coplas a la Muerte de su Padre”) con los que tanta relación tuvieron los Berruguete.  Iglesia de Santa Eulalia. Paredes de Nava La ascendencia vizcaína del abuelo de Pedro Berruguete (Pedro Berrueta) según documentos, natural de Vizcaya o Alava posiblemente del condado de Treviño en donde se dice que tiene casa solariega, porque era hijosdalgo y  sirvió aquí como escudero: ("que se encontraba dentro de los criados que tenían funciones militares, como los alcaides de las fortalezas, los donceles y los mozos de espuelas. y formaban parte de la clientela “político-militar” del señor, y solían recibir para su mantenimiento una tierra y ricas donaciones.) Después siguió a D. Pedro Manrique  a

THIELDONES

Haciendo una visita al museo arqueológico de Palencia, también conocido por los palentinos como “La casa del Cordón” podemos hacernos una idea de la historia de la provincia y como ha sido su evolución e historia.  Museo arqueológico de Palencia Los vacceos, fueron el primer pueblo con presencia estable en la Meseta Norte desde el S.III a.C, rendían especial tributo a sus caballos Thieldones. Una raza de cabeza afinada, perfil recto, patas delgadas y grandes cascos, admirada y venerada por su resistencia en el campo de batalla, aunque formaban parte de su vida diaria tanto para la labranza, como viajes, etc. Tal era la admiración de los vacceos por estos animales que han llegado hasta nosotros numerosos símbolos que los representan. Broche Thieldones Esta devoción se evidencia en esta obra, que forma parte de la colección del Museo Arqueológico de Palencia, un valioso broche de oro, de 3 centímetros de alto y 25 gramos de peso, que está considerada la joya cumb

EL CAPRICHO DE LOS RESTAURADORES

En una de las gárgolas (desagües de piedra esculpidos) de la catedral gótica de Palencia, nos encontramos la figura de un fotógrafo que parece retratar a los visitantes, ya que está sujetando entre sus manos una cámara fotográfica de fuelle. Hay numerosas leyendas urbanas tanto del origen como de la identidad de este pequeño habitante de la Bella Desconocida. La escasa (o nula) documentación existente al respecto, unido a que el estado de conservación de la gárgola es muy similar al resto, contribuye de forma notable a la confusión. Se trata de una pieza tallada por Mariano Otero durante la restauración a principios del siglo XX, siendo el arquitecto diocesano Jerónimo Arroyo. Una de los mitos es que se trata de un fotógrafo que murió al caerle encima la gárgola original, y que la gárgola situada a su lado (un esqueleto) representa su muerte. Gárgola del fotógrafo. Foto:  catedraldepalencia.org Es posible que la gárgola represente al célebre fotógrafo José Sanabri